el rival de Pixar ‘made in Spain’

Actualmente, Skydance Animation se está convirtiendo poco a poco en uno de los principales referentes del cine de animación mundial. Las películas Luck y la reciente Hechizados, de Netflix, son sus dos grandes bazas hasta ahora, pero en los próximos años aspiran a seguir creciendo cada vez más. Su origen data de 2017, cuando la gigante Skydance Media (Misión Imposible, Top Gun: Maverick) decidió abrir una subdivisión de animación y firmar un acuerdo con el estudio madrileño Ilion Animation. Tres años después, absorbieron directamente a la compañía española para hacerla una sede subsidiaria de sus estudios centrales de Los Ángeles.

Gracias a Netflix, en Hipertextual hemos tenido la oportunidad de visitar Skydance Animation Madrid, una de las sedes más grandes de la compañía y que nunca se había abierto antes a la prensa. En ella trabajan cerca de 700 personas, el grueso del estudio a nivel global. «Este es el estudio de animación más grande de España», nos da la bienvenida Álvaro Figuero, coproductor de Hechizados. Solo ese dato ya da buena seña del nivel de ambición del proyecto.

«Siempre se tuvo la visión de tener un estudio de animación con contenido original, historias originales, con personajes memorables y que transcurrieran en mundos fantásticos que solo se pudieran experimentar en cine de animación», explica a continuación los objetivos de Skydance Animation. Como ejemplo de esta meta, en la entrada nos reciben estatuas de los personajes de Hechizados. Además, por las paredes de todo el estudio cuelgan enormes bandas con imágenes conceptuales de futuros proyectos.

Creación de un proyecto

A Figuero se une pronto otro de los grandes responsables de Hechizados, Guillermo Ramírez, diseñador de personajes de la película y dirección de arte. «Empezamos con una idea que suele ser estupenda. De un primer borrador del guion empezamos a sacar ideas, buscamos la básica y más importante de la peli», nos cuenta el creativo, que emplea mapas conceptuales y bocetos del mencionado filme, disponible en Netflix desde el pasado 22 de noviembre.

«Con los artistas hay un gran intercambio de dibujos, estilos, ideas, personajes que se nos ocurren, referencias… Luego se escribe el guion, que no se termina hasta el final, y de él salen personajes y escenarios», prosigue Ramírez. Es entonces cuando de verdad comienza el trabajo de los diseñadores de Skydance Animation. «Empezamos a hacer una investigación para buscar cómo son. Tenemos que explicar quién es ese personaje», insiste. Para ello, estudian los patrones de movimiento, sus peinados, ropas, personalidad, expresiones faciales… Todo ello se comparte con los departamentos específicos correspondientes y acaba con el modelado 3D.

Tras todo este proceso, es el turno de los diferentes profesionales que componen Skydance Animation tanto en Madrid como en Estados Unidos. Gracias al trabajo colaborativo y la comunicación constante a ambos lados del Pacífico, se llega al resultado final. Concretamente en España es donde se da vida a las películas al realizarse la parte de arte, 3D, etc. Solo con recorrer sus enormes oficinas, divididas en varios pisos, se evidencia que la magnitud del estudio es muy diferente al resto de la animación local. Es una compañía pensada a lo grande para mirar de tú a tú, desde Madrid, a otras como Disney, Pixar, DreamWorks, Sony Pictures Animation…

Skydance Animation, ¿la nueva Pixar?

Nada más entrar, lo más llamativo de Skydance Animation Madrid es el amplísimo y luminoso patio central que alberga el edificio. A su alrededor, distintas alas divididas en cubículos con ordenadores, pizarras y material de primer nivel dan cobijo a sus empleados. Además, en el piso inferior ese mismo hall cuenta con máquinas de comida y hasta una canasta y una mesa de ping-pong para que los trabajadores desconecten en sus ratos libres. «Es un estilo muy americano, muy Pixar«, nos reconoce el ejecutivo durante la visita.

De hecho, tiene mucho sentido que sea así. Y es que entre las filas de Skydance Animation se encuentra uno de los nombres más importantes de la historia del cine de animación. En 2019, la compañía contrató (con mucha polémica de por medio) a John Lasseter, uno de los miembros fundadores de Pixar y director de Toy Story, Toy Story 2, Cars, Cars 2 y Bichos, como jefe de animación. La decisión produjo malestar externo por las acusaciones de conducta sexual inapropiada del cineasta durante su tiempo en Pixar. Pero, pese a todo, su fichaje ha servido para dar aún mayor entidad al estudio.

Por sus manos pasan la mayoría de decisiones importantes de cada película. Por el momento, según nos cuentan, no va a dirigir ningún proyecto a nivel personal, pero sí supervisa todos los que tienen en marcha. El gran ejemplo es, una vez más, Hechizados. La película, en la que Lasseter ejerce de productor, está dirigida por Vicky Jenson, directora de Shrek. El guion corre a cargo de Linda Woolverton, que ya escribió las versiones animadas de El rey león o La bella y la bestia. Y la banda sonora está compuesta por Alan Menken, el genio ganador de nueve premios Oscar por La sirenita, La bella y la bestia, Aladdin o Pocahontas.

Crecer y expandirse

Figuero nos reconoce que Hechizados ha supuesto para ellos un crecimiento muy importante. Con la película, han contratado y formado a mucho talento que les permitirá alcanzar nuevos límites en el futuro. Porque el filme es solo el primer estreno de los varios que seguirán en los próximos años gracias a su acuerdo con Netflix. Entre ellos estará, por ejemplo, una película dirigida por Brad Bird (cofundador de Pixar y director de Los Increíbles, El gigante de hierro y Ratatouille). También están produciendo otra junto a Rich Moore (¡Rompe Ralph!, Zootrópolis, Los Simpson).